viernes, 23 de septiembre de 2011

Max Weber “El político y el científico”

La obra se centra en el desarrollo que la política a experimentado en los últimos tiempos.
Para desarrollar la obra el autor se centra n un primer momento en concepto de lo que es la política, sobre una de las directrices que seria la dirección de una asociación política (Estado). En este sentido definirá la política como “La aspiración a participar en el poder entre los distintos Estados, dentro de un mismo Estado, entre los distintos grupos de hombres que lo componen”.[1] Entonces podemos entender que el que hace política aspira al poder.
Si partimos de estas premisas el estado se va a ver como una empresa de dominación que requiere por un lado de la orientación de una actividad humana hacia los que tienen el poder legitimo y por otro de un poder de disposición.

Se puede advertir el papel que juegan entonces las personas en el desarrollo de la política, y se resalta lo que el va a llamar asociación estatalmente estructurada que va a ser algo así como la asociación política en la que los medios de comunicación son en todo o en parte propiedad del cuadro administrativo, el estado moderno afirma es una asociación de carácter institucional que ha tratado y con éxito de monopolizar dentro de un territorio la violencia física como medio de dominación y señala a los políticos de profesión como instrumentos para asentar este poder.
Sin duda hay muchas maneras de hacer políticas y también muchas maneras de conseguir y mantener ese poder, la violencia seria como el primer modo, pero también podemos señalar la demagogia, podemos señalar también a los políticos que se dedican a esta tarea simplemente por vocación, las personas que se acercan a la política simplemente por ostentar un poder económico seguro, otros que aunque no les hace falta el dinero gusta de poseer el poder de decisión…

Entonces a partir de todo esto se puede decir que todas las personas que conformamos el estado somos los que vamos moldeando la política y dándole un sentido, nosotros participamos de distintas maneras en la política; a veces como políticos profesionales, de ocasión, semi-profesionales… porque sentimos y/o vemos la necesidad de mantener un orden en el ambiente en el que nos desarrollamos, la necesidad de crear normas de conductas que permitan el desarrollo común de las personas que conforman el estado. Sin embargo en nuestra historia muchos políticos han querido establecer normas y principios que muchas no están a favor de todo el estado, rompiendo así con el principio de bienestar que se busca y por ello puedo entender que surgen estos movimientos revolucionarios que van a intentar menguar este poder que muchas veces es sostenido por medio de la fuerza, para crear un nuevo estado que vea por las necesidades a un nivel general.
El crear normas o leyes que regulen los estados es algo que ha sido de gran importancia, pero leyes que vean por los intereses de todos los grupos.



[1] Max Weber “El político y el científico” Pág. 84

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